no hay que confundir la espumilla con el carbonato
no hay que confundir los sopes con las garnachas
no hay que dar el piojo, aunque nos esté picando
no hay que darle la razón al indio, aunque la tenga
no hay que darle vueltas al malacate, porque se enredan las pitas
no hay que darlo aunque lo pidan, sólo que lo paguen bien
no hay que dejar el sarape en casa, aunque esté el sol como brasa
no hay que echarse alacranes al seno
no hay que fiar en tiempo de aguas