El amor interrumpido que luego reemprende mediante la reconciliación es siempre inferior al amor sin nudos que ha ido creciendo más y más, de forma ininterrumpida, sin tener que volver a anudarse; sucede en él como con un guiso, un pastel o un chocolate recalentados: son de segunda. Se aplica a situaciones de amores reconciliados. Véase lo dicho a propósito del refrán "el amor es como los pasteles, que recalentados no sirven". En este caso, se trata de un refrán de estructura "ni ni" en donde cada una de las frases en "ni" es el miembro de una comparación: el amor reanudado es comparado al chocolate recalentado. Los dos miembros del refrán, de tamaño desigual, tienen una rima consonante. Variante:: "ni tamal recalentado, ni amistad reconciliada" (F. 5).