Nació el 15 de abril de 1888 en Pinos, Zacatecas; murió el 9 de noviembre de 1939. Ingresó a la Academia como miembro correspondiente en 1938.
Realizó sus estudios primario y superiores en la ciudad de Aguascalientes. Posteriormente se trasladó a la ciudad de México, en donde inició su carrera como escritor. Escribió ensayos, cuentos, reconstrucciones del pasado, pero destacadamente crítica literaria. En la política ocupo una curul en la Cámara de Diputados como representante de su estado natal.
Fue también director de la Biblioteca Nacional. En este puesto, conmemoró, mediante exposiciones notables por su riqueza y organización, los primeros veinte años de la Revolución Mexicana, el centenario del Romanticismo y el de Goethe, y organizó variados ciclos de conferencias. Patrocinó la edición en facsímil de Los mexicanos pintados por sí mismos, curiosa pieza bibliográfica del siglo XIX, escrita por varios autores; la valiosa obra La litografía en México, integrada con las primicias de ese género en nuestro medio (prólogo de Manuel Toussaint), y el ensayo Facundo en su laberinto, de Héctor Pérez Martínez.
Su obra es numerosa, y dentro de ésta podemos encontrar: “El poeta filósofo” (1924), Viajes al siglo XIX (1933), Historia crítica de la tipografía en la ciudad de México (1934-1935), Galería de fantasma. Años y sombras del siglo XIX, La gracia de los retratos antiguos (1950), Con la sed en los labios (1919).
(Con información de Semblanzas de Académicos. Antiguas, recientes y nuevas de José Luis Martínez).