Minucias del lenguaje - José G. Moreno de Alba, publicadas por el FCE
Minucias del lenguaje - José G. Moreno de Alba, publicadas por el FCE
ENTRE LAS MUY NUMEROSAS acepciones que el DRAE establece para el verbo tomar, la trigésima cuarta señala que, como pronominal, ese vocablo equivale a 'emborracharse, sufrir los efectos del alcohol'. Conviene, en este caso, acudir al mismo Diccionario para ver qué entiende la Academia por verbo pronominal. En la entrada que corresponde al sustantivo verbo puede leerse que verbo pronominal es 'el que se construye en todas sus formas con pronombre reflexivo'. Allí mismo hace ver que hay verbos exclusivamente pronominales (como arrepentirse) y otros que adoptan ciertos matices significativos o expresivos cuando se usan con pronombres (según esto, morir es, en algo, diferente de morirse).
        Obviamente tomar pertenece a la clase de verbos que puede ser pronominal o no, ya que existen tomar y tomarse. Me llama sin embargo la atención que se exija la forma pronominal para que tomar adquiera el significado de 'emborracharse'. En primer lugar habría que señalar que el DRAE no establece si el verbo pronominal tomarse puede o no llevar complemento directo. Supongo que sí: "se tomó una copa". Aun así no hay de ninguna manera una equivalencia entre "se tomó una copa" (o muchas) y "se emborrachó". Supongamos ahora que pudiera no llevar objeto directo. Esto llevaría a enunciados francamente agramaticales: *Juan se tomó, por ejemplo, no sólo no significa 'Juan se emborrachó' sino que simplemente no significa nada. Creo que se trata de una acepción mal explicada en el Diccionario.
        En el español mexicano, en relación con bebidas alcohólicas, existe tomar y tomarse. Este último, pronominal, siempre lleva objeto directo ("se tomó una copa") y no tiene necesariamente el sentido de 'emborracharse'. Por su parte, tomar puede llevar o no complemento directo ("tomó una copa", "toma mucho"). Creo que es más usual sin objeto directo y, en tal caso, equivale precisamente a 'beber habitualmente bebidas alcohólicas', significado cercano ya, como se ve, a 'emborracharse'. Pero, insisto, para llegar a ese exacto sentido, el verbo debe construirse sin pronombre y sin objeto directo. En la oración "todos mis amigos toman", en el español mexicano entendemos algo así como 'todos mis amigos acostumbran beber bebidas alcohólicas'.
        El verbo tomar (y no tomarse) puede tener en el español mexicano (y, probablemente, en el americano en general), según el contexto, tan evidentemente el sentido de 'beber habitualmente bebidas alcohólicas', que de él procede el adjetivo sustantivable tomador ('aficionado a la bebida'). Este significado se transparenta también con evidencia en el empleo del participio pasado (tomado, -a), que equivale (éste sí) a borracho(a). Se trata de un caso más de participio pasivo que adquiere cierto sentido activo. El DRAE, aunque no registra tomado como activo, sí incluye bebido ('que ha bebido en demasía y está casi embriagado'). Así como hombre agradecido no es aquel a quien se agradece algo (pasivo) sino el que agradece, el que se muestra agradecido (activo), también un hombre tomado, en el español americano, no es sólo el que es tomado por alguien o algo (sentido pasivo) sino el que ha tomado (bebidas alcohólicas) en cantidades inconvenientes (sentido activo). Ello permitía decir a aquella simpática aldeana que no podía molestar a su marido cuando andaba "tomadito" ('algo borracho', 'borrachito').

Comparte este artículo

La publicación de este sitio electrónico es posible gracias al apoyo de:

Donceles #66,
Centro Histórico,
alcaldía Cuauhtémoc,
Ciudad de México,
06010.

(+52)55 5208 2526
Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. 

® 2024 Academia Mexicana de la Lengua