Refrán popular que asienta categóricamente que una cosa es la amistad y otra, muy distinta, son las cosas relacionadas con los negocios, como el dinero. Se emplea cuando alguien aduce razones de amistad para lograr un beneficio de otra índole. Está estructurado en forma de un verso con dos cesuras que le da la apariencia de una estrofa tres versos desiguales con rima oxítona del primero y el tercero. Variante: "amigos del camino, pero no del itacate" (F. 12).