Refrán ranchero que en forma exclamativa dice que cuando se está de buenas todo se da bien. Tiene el mismo sentido paremiológico que refranes como "cuando el tiempo nos ayuda, los secos troncos retoñan" o bien "cuando el garañón es bueno, hasta los vaqueros se ubran". Tiene la forma de una exclamación sentenciosa. Variante: "de que el temporal es bueno, hasta las trancas retoñan"(F. 49).