Refrán popular que en forma sentenciosa significa lo que enuncia: para todo hay tiempo o, como se dice, "hay más tiempo que vida. Este principio es metido en una estructura paremiológica que ya utilizan otros refranes. Por ejemplo: "todo cabe en un jarrito sabiéndolo acomodar" o bien "¡todo cabe en un costal en sabiéndolo acomodar!".