Refrán popular de índole exclamativa que aconseja no desesperarse y obrar en todo con orden, cuidado y paciencia para lograr lo que uno se ha propuesto. Quizás la imagen del jarrito no sea la más adecuada para un reacomodo y haya que acudir a la variante que dice "¡todo cabe en un costal en sabiéndolo acomodar!"