En el caso del español hablado en México, es frecuente utilizar el sustantivo calor como femenino, la calor, con el mismo significado que el calor. Esta variación no modifica el significado del sustantivo, así que, no hay necesidad de hacer aclaración alguna en los diccionarios generales. Sin embargo, en el Diccionario panhispánico de dudas, elaborado por la Real Academia Española y la Asociación de Academias de la Lengua Española (Bogotá: Santillana, 2005) se recomienda emplear calor como sustantivo masculino en la lengua general, sobre todo en contextos formales para la lengua oral y escrita; aunque reconoce que era común usarlo en femenino en el español medieval y clásico, lo que se explica la variación entre el calor y la calor en algunas zonas hispanohablantes.